Quieres aprender nuevos idiomas, pero te cuesta entenderlos y te resulta complicado. No te preocupes y toma nota de algunos consejos que te ayudarán a tener un aprendizaje más sencillo.
¿Sabes lo que haces?
Si no tienes un buen motivo para aprender otro idioma, es muy probable que, a la larga, se te acabe la motivación. Sea cual sea tu motivación, cuando decides aprender un nuevo idioma, lo realmente importante es comprometerse al máximo y buscar una causa clara para su aprendizaje y formación.
Indaga y sumérgete en el idioma
Si te enfocas en el idioma en el que te estás sumergiendo, no importa qué herramientas uses para aprenderlo, sino que lo importante es practicar todos y cada uno de los días. Para ello, es aconsejable que pienses en ese idioma e incluso, intenta escribirlo o hablarlo. Consiste en poner en práctica lo que sea que estés aprendiendo, ya sea escribiendo un e-mail, escuchando música o la radio, se trata de sumergirte completamente en un idioma.
El mayor beneficio de hablar otro idioma es poder comunicarte con otras personas. Ser capaz de mantener una conversación sencilla es una recompensa en sí misma. Alcanzar metas de este tipo hará que sea más fácil seguir con motivación.
Encuentra una persona con la que practicar
Tener a alguien que también hable el mismo idioma, te empujará a seguir intentándolo un poco más y a permanecer en constante práctica.
Aprender a escuchar antes de aprender a hablar
Cualquier idioma suena raro la primera vez que lo escuchas, pero cuanto más lo escuchas más familiar se vuelve y más fácil te será hablarlo. Debes pensar que eres capaz de pronunciarlo todo, pero que aún no se está acostumbrado a hacerlo. Es cuestión de tiempo.
Diviértete
Usa tu nuevo idioma de cualquier forma que sea creativa, ya sea dibujando, escribiendo una historia o grabando canciones.